Alguno de nuestros Hogares Residuo Cero ya se ha puesto a darle vueltas al coco para intentar minimizar los residuos de comida que se generan en nuestras cocinas. Recuperando recetas tradicionales o innovando podemos rescatar muchos restos de comida que estaban condenados a convertirse en residuos y utilizarlos como ingredientes de nuevas recetas.
Aquí podéis ver un muy buen ejemplo que nos envía María del Camino: la receta de una sopa de pollo y unas torrijas con pinta de estar riquísimas.
1) Sopa de pollo: Al pollo que ha sobrado se le añade un litro de agua y se pone a cocer durante 20 minutos. Se saca el pollo y se va separando con cuidado la carne de los huesos. El caldo se pasa a otro recipiente, colándolo para evitar que pase algún hueso; se pone de nuevo al fuego, se añade una pastilla de «caldo de pollo» y cuando empiece a hervir se añaden 3 cucharadas de fideos. Se deja cocer a fuego lento durante 10 minutos; en los últimos minutos se añade la carne de pollo.
2) Torrijas: El pan que ha sobrado (media barra) se corta en rebanadas y se ponen en un recipiente de fondo plano procurando que ocupen todo el fondo. Se hierve medio litro de leche, con unas 2 cucharadas de azúcar (según gusto) y una rama de canela, durante 5 minutos. Se echa sobre las rebanadas de pan; si no quedan bien empapadas se añade un poco más de leche. Cuando se han enfriado se rebozan en huevo batido y se fríen en aceite bien caliente. Finalmente se espolvorean con azúcar y canela.
